Sam Tallon tiene en su cabeza la clave para ganar la guerra. Pero para poder llevarla hasta la Tierra, deberá fugarse de la cárcel de máxima seguridad en la que se encuentra, a través del peligroso pantano que la rodea. Sabiendo lo que está en juego, nada detiene la determinación de Sam: ni el peligro, ni la muerte, ni siquiera el hecho de estar ciego. Al fin y al cabo, si no tienes ojos, siempre puedes tomar otros prestados.
Esta novela, magníficamente narrada por Bob Shaw, tiene todos los elementos para estar entre las que
más recomiendo de Ciencia Ficción: Espías, saltos hiperespaciales, aventuras, acción y ¡hasta un perro adorable! El ritmo es ligero haciendo una narración fácil de leer y aún así, logra transmitir las sensaciones de angustia durante el viaje en la oscuridad de Sam.
Pese a no estar considerada una gran obra de la ciencia ficción, es una de esas historias que se disfrutan de principio a fin, incluso en la relectura. Leerla es tener en tu cabeza una película de acción muy bien construida y casi imposible de adaptar al cine. Así que abrid el libro y embarcaos en el Periplo Nocturno junto a Sam Tallon.
